-. No cabe la menor duda que entre los
economistas, va hacia el Premio Nobel, con una ingeniería económica que cuando
él la explica suena tan fácil… y tan posible. No cabe duda que es dueño de una
gran hazaña que deberá repetirse en las deudas de muchos países, ya que el
nuestro es un “leading case” entre más o menos cuarenta naciones deudoras. La
Deuda Argentina, inútil, indigna, e ilegítima, ya tiene destino. Ahora solo nos
falta detener a los ladrones y hacerlos que paguen. Sería la primera vez en la
historia. Nuestro Rey economista ha convertido en oro el legado de plomo del
macrismo, de aquí en más tenemos que tener más cordura que todas las otras
veces de nuestros 200 años de historia. ¿Habremos aprendido?
-. El logro no es menor, pero mis lectores
saben que yo ya se los había anunciado. Para mí era un final cantado. Ya en
1982, la entonces URSS, nos había ofrecido un portaaviones y un submarino
nuclear completo y artillado para que defendamos nuestras islas, y les dijimos
que no. El rey del Imperio de Occidente de hoy, ordenó que no se le corte las
alas a la Argentina, pues, esta vez, si le ofrecen una ayuda como esa no podrá
decir que no. Y el abismo, hoy por hoy está del otro lado, Argentina hoy goza
de una situación de lejanía que hace prácticamente incontaminables todo los
alimentos que produce y con él todo su futuro económico. En realidad, la gran
potencia del norte no podía permitirse el lujo de que Argentina no encuentre un
camino posible y viable…el sur existe.
-. El Imperio en cambio, hoy va derecho al
abismo. Este acuerdo nos deja en paz y de rodillas frente al sistema del dólar,
pero, mantiene para el gobierno actuante, abierto totalmente las puertas de
ambos lados, oriente y occidente, oriente con sus crecientes divisas
tecnológicas y occidente con su dólar petrolero. Y la Argentina siempre con sus
ingentes y valiosos recursos naturales, mal aprovechados y mal defendidos. Lo
bueno de este gobierno es que no se ha dejado engañar por la magia y la mafia del
“power point”, es muy bueno tener objetivos, es malo salirlos a presumir. El primero ya está cumplido,
necesitamos y queremos dólares, pero no a cualquier precio.
-. Para cualquier observador incauto, USA
pareció tomar la delantera en el camino al Planeta Marte, si no percibimos que
China e Irán ya han enviado sendas nuevas misiones hacia allí sin tanta
publicidad, pero con más ambiciones, vemos que, ya son más las naciones que se
han puesto a la par del Imperio en tecnología espacial, y en casi todas ellas
hay ingenieros argentinos, al parecer nos destacamos tanto científicamente como
lo hacemos en el fútbol. Esto nos lleva a la tecnología que en poco tiempo nos
devolverá la soberanía informática, campo imprescindible en este mundo
pandémico, de aquí en adelante. Tenemos los elementos para echar por tierra a
esos abominables monopolios comunicacionales que nos mienten todos los días y
manipulan la mente del 30% de los nuestros que se resisten a salir del closet
de la mediocridad.
-. Como nos dijo alguna vez nuestra jefa
política, los que tenemos al frente son, estúpidos, ambiciosos o mala leche,
sólo así se explica que vayan en contra de sus propios intereses, y que repitan
como loros slogan que van contra sí mismos. Esta pandemia les ha demostrado a
muchos lo bueno de un gobierno que educa, cura y alimenta además de cuidar el
bolsillo y la moneda de su gente. Aunque lo haga cobrando impuestos al que
puede pagarlos, aunque sean tan pijoteros que siempre lloran. Son como esos
parientes pudientes que siempre se quejan de todo para que nadie les pida nada.
Los economistas “mala leche” que en muchos casos defienden más al sistema dólar
que nos parasita, que los mismos economistas norteamericanos que lo critican
ácidamente.
-. Esa estupidez creada por la manipulación
cultural imperial a través de un siglo de estudio y aplicación de una ciencia
nueva, llamada “sociología”, base y pilar de sus éxitos comerciales y
publicitarios, han causado que la estupidez sea la marca del “estilo
occidental”, por eso tenemos “anticuarentenas”, “terraplanistas”,
“terrahuequismo” y “cuantoboludismo” te puedas imaginar. Pasto para manipular,
usar y desechar a su antojo, estamos inmersos en un mar de estupidez, no
podemos dejar de asustarnos porque antes del fin “es la locura”. Tenemos la
obligación de militar en despertar a cuantos nos sea posible de la
multiplicidad manipuladora de publicidad, religión, medios de comunicación, y
de productos culturales manipuladores (de moda) al por mayor. Suficiente por
ahora kumpas queridos. Rodac 06/08/20.
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