-. Nunca como ahora, no subestimen sus
fuerzas compañeros, ni su número, ni su alcance, no piensen ni por un minuto en
dar pasos atrás, porque no vamos por mal camino, ni estamos cometiendo errores,
como en todo camino político, dentro del “arte de lo posible” estamos haciendo
mil veces más que lo que hicieron ellos en cuatro años, a pesar de tener pandemia mortal y peligrosa encima, el
paroxismo histérico de los opositores nos demuestra que contra nosotros solo
tienen el odio. Ese odio que enferma y mata, egoísmo sin límites morales ni
éticos, una pequeña multitud sin escrúpulos.
-. Nunca como ahora ha sido tan necesario
que opongamos al odio, el amor, al
egoísmo la solidaridad, al individualismo,
la cooperación, a la meritocracia, la
unidad de equipo, a ese egoísmo individualista desesperado debemos oponerle
nuestra unidad consolidada alrededor de un gobierno que sin ser perfecto hace
todo lo que puede y con eso solo, es mucho, tanto que el mundo entero se
conmueve por lo que estamos haciendo y no duda en señalarnos como el país
americano que mejor ha respondido a la pandemia en el sur y en el norte.
-. Hoy es bueno recordar y recordarles que
el mundo que habitamos es uno solo, que la humanidad es solo una, y respecto de
nuestro futuro como tal, es mucho más lo que no sabemos que lo que sabemos.
Pero hay cosas que si sabemos, por ejemplo, el virus está perdiendo mortalidad,
y no sabemos porque, no sabemos si es por sí mismo o si lo estamos tratando
mejor con nuestras acciones sanitarias y profilácticas, o si dejando de hacer ciertas acciones puede volver con su furia
inicial. Combatimos a un amigo invisible y desconocido. A medida que se expande
está matando menos, pero los científicos no lo dicen porque el común de la
gente exacerba lo que se les dice. Sería contraproducente.
-. Sabemos que si pudiéramos detener las
actividad humana por una semana, el virus terminaría por desaparecer, o casi,
pero, ¿Quién podría coordinar una acción humana como esa en el mundo de hoy? Esto
nos demuestra que no somos civilizados como pensamos, así como a los
cavernícolas de hace diez mil años, a nosotros también nos puede pasar
cualquier cosa y en cualquier momento, ¿Qué ha cambiado? Por eso ni digan ni
piensen que somos civilizados, y si nosotros no lo somos, nuestros opositores,
menos. Ser innovadores tecnológicamente
no significa ser evolucionados.
HABLANDO DE NEOLIBERALISMO:
-. He conocido delincuentes, son más
comunes de lo que uds piensan, pero los que conocí, mandan sus hijos a la
escuela, al dispensario, ayudan a su vecindario y la gente los quiere y los
defiende, toman la palabra cuando la gente no se anima a decir nada y hacen
fiestas donde no falta nadie. Pero los políticos neoliberales son peor que los
delincuentes, no quieren ni a su madre, no respetan ninguna ley, ni tienen
códigos y mucho menos honor. Se ríen de la gente tanto que si te mueres buscan
de inmediato si tu muerte les puede servir en algo. Y nosotros les hablamos de
política, de proyectos, de sueños y de esperanzas, ellos se dan la vuelta y se
nos ríen. No intentemos más darles vuelta la cabeza, es imposible.
-. No gasten saliva en intentar cambiarles
la cabeza, son los mismos de hace cuatro años, solo recuerden que si no fuera
por ellos, Santiago y Nahuel estarían
con nosotros, nos deben cuarenta y cuatro marinos, son los mismos que
encerraron a gente mejor que ellos, a Julio De Vido, que hizo más escuelas,
casas y obras públicas en todo el país que ellos en cuatro miserables años, a
Amado Boudou que le saco de la boca las AFJP al grupo Clarión, a Milagros Salas
que sin serlo hizo más obras que los cinco últimos gobernadores de Jujuy.
Neoliberales son y fueron una plaga, pero nosotros no. No nos veamos como
ellos.
-. Opongamos el amor al odio, como dice el
Papa Francisco, convivamos con ellos en este mundo que es uno solo, con amor
intentemos rescatar a los que engañados o estúpidos han creído en ellos, y no
lo hagamos con tantas palabras, porque las palabras aturden, y mucho más cuando
te dicen cosas que sabes que son ciertas, cuando te han envenenado de odio las
palabras duelen. Opongamos nuestro ejemplo, las palabras aturden, pero el
ejemplo arrasa, y somos muchos más que lo que pensamos, se nota cuando nos
quedamos en casa, y compramos en negocios y tiendas de barrio (que cada vez hay
más), cuando usamos barbijo y eludimos las fiestas y las invitaciones “por la
pandemia”, se nota, si vamos al banco o la farmacia y respetamos el
distanciamiento, se nota, se nota mucho. Siempre somos más quedándonos en casa
y ellos en la calle, cada vez menos.
-. Luchemos siendo solidarios,
cooperativos, dejemos los gritos y los alaridos para ellos, pensemos que hay un
Dios y una Naturaleza que se ocupará de ellos, nadie los ofende sin pagarlo de
alguna manera, lo sabemos por experiencia. Nosotros nos ocupemos de las cosas
que están en nuestras manos y de promocionar lo bueno que está haciendo nuestro
gobierno, que es un montón, empezando con la deuda que discute con buitres de
adentro y de afuera, los popes macristas son buitres, tienen bonos de nuestra
deuda externa, de la deuda a cien años, de nuestras empresas de servicios, y
son más implacables que los de afuera.
-. Nuestra deuda externa es el clásico
ejemplo del poder que tiene el deudor inteligente, hay casi 70 países pobres en
el mundo, cuyas deudas externas están esperando a ver qué pasa con la nuestra,
hasta la ONU y el FMI, han reconocido que si nosotros no podemos pagar, esas
naciones, menos. Hay potencias que les interesa que esas naciones deudoras se
unan en una especie de Club de Naciones Deudoras, dos o tres de esas potencias
pueden comprar más de la mitad de todas
esas deudas “eternas” y pagarlas con bonos de la mayor acreedora y deudora del
mundo en su moneda, o sea, dólares, lo cual, por supuesto, acabaría con esa
moneda y su sistema.
-. Ese sistema sería reemplazado por las
monedas de los países compradores y así cambiaría por completo el perfil
monetario del mundo, desaparecería el pozo negro de una furibunda burbuja
financiera, y si ese imperio quisiera salvarse a sangre y fuego, como siempre,
estarían las armas de cinco grandes potencias para oponerse. Por supuesto que
el mundo podría lanzarse a un nuevo ciclo de crecimiento que quien sabe adónde
nos llevaría, los chinos y los rusos quieren probar ciudades marítimas y sus
viviendas lunares antárticas, para lo cual necesitarán científicos y técnicos
de todo el mundo, la producción de alimentos pegaría un salto brusco con la
huerta familiar hidropónica prearmada y con la piscicultura casera.
-. Nuestro gobierno se sale de la vaina por
poner a las provincias en actividad, pero en forma más intensa que en cualquier
otro momento de la historia, y tiene con qué, las importaciones han menguado, y
la emisión monetaria está dando aire para inversiones internas ahora que la
pandemia desaconseja los viajes internacionales, entonces planea un fuerte
despliegue del plan procrear, que tiene su propia dinámica, del turismo interno
inteligente y autosustentable, lo que si podríamos fabricar y exportar en
cantidad son autos eléctricos, económicos, limpios y eficientes, de los cuales
ya se están fabricando tres modelos en tres provincias. El futuro nos promete
tanto como la inteligencia y oportunidad con la que hemos luchado contra el
coronavirus. No le digamos que no. No perdamos el tiempo en discutir, responder
y pelear, bailemos con un gobierno que nos cuida, que para eso lo votamos.
RODAC- 20/07/20
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